Paul Watson es un hombre de 49 años, de Minnesota, que ganó la lotería, 149 millones de dólares, y lo primero que hizo fue comprar el restaurante donde llevaba trabajando 17 años, y decidió aumentar el sueldo a todos sus compañeros… excepto a uno, ¡el gerente! Para él tenía una sorpresa mucho más especial ya que no se había portado especialmente bien con sus trabajadores.
Compró la empresa y vistió a su jefe de pollo!
Cuando se convirtió en jefe, Paul Watson decidió dar un nuevo puesto de trabajo al gerente y convertirlo en el ‘director de relaciones públicas’ del restaurante. Ese puesto, lejos de estar en un despacho, implicaba que el ex-gerente saliese a la calle vestido con un disfraz de pollo a repartir muestras de pollo frito.
“Ese imbécil nos gritaba y nos trataba como esclavos”.
“Durante 19 años, fui el gerente del restaurante. Yo era el jefe aquí, ahora ese imbécil me ascendió … ¡pero tengo que disfrazarme de estúpido pollo! ¡Eso no es una promoción!
Watson dijo a los periodistas que no le importa la demanda, alegando que “desquitarme con ese hombre no tiene precio”.
Y tú, ¿qué harías si te tocase la lotería?
Escríbelo en los comentarios a continuación.